La editorial pamplonesa restaca el clásico de Nicolás Maquiavelo, en una edición de Alta Bibliofilia con nueva traducción anotada y grabados originales de tres artistas
El 4 de octubre de 2019, en la sede del Museo Lázaro Galdiano en Madrid, se falló el Premio Lázaro Galdiano en sus dos modalidades: en la categoría de Obras de Edición Artística para Bibliófilos, el galardón fue para la editorial navarra Liber Ediciones, por su obra El Príncipe de Maquiavelo, editada en noviembre de 2018, en una edición limitada a 195 ejemplares que se integra de prólogo, estudio introductorio, nueva traducción y quince grabados originales realizados por los artistas: Manuel Alcorlo, Pedro Osés y Vicente Arnás.
En la modalidad de Libros de arte de carácter general, el premio fue concebido a la editorial RM Verlag, de Barcelona por la obra Remembering the future, libro de fotografías de Ángel Albarrán y Anna Cabrera.
Este prestigioso premio promovido por la Fundación Lázaro Galdiano, el Gobierno de Navarra y con la colaboración del Ayuntamiento de Beire, su localidad natal, homenajea a quien da su nombre, por su incansable amor por los libros, una pasión que lo convirtió en un experto bibliófilo, llegando a reunir una biblioteca selecta de más de 20.000 volúmenes, entre manuscritos e impresos. Considerado uno de los más notables bibliófilos españoles de finales del siglo XIX y primera mitad del XX, su colección reúne una envidiable selección de ejemplares raros, bellos e interesantes, verdaderas joyas bibliográficas que atesoró con veneración.
A esta octava edición del Premio, optaron veinticinco obras, de trece editoriales diferentes. El jurado, compuesto por el Director General de Comunicación y Relaciones Institucionales del Gobierno de Navarra, don Pablo Roncal Los Arco; Don Juan Antonio Yeves Andrés, jefe de la Biblioteca del Museo Lázaro Galdiano; Don Guillermo Nagore Ferrer, diseñador gráfico y director de Comunicación de la Fundación Juan March y Don Matías Múgica Franco de Medinaceli, técnico de la Sección de Publicaciones del Gobierno de Navarra, tomó la decisión por unanimidad.